2 nov 2024

Louis Aragon: LA ROSA Y LA RESEDA

 A Gabriel Péri y d' Estienne d'Orves así como a

Guy Moquet y Gilbert Dru


El que creía en el cielo

El que no creía en él

Adoraban a la bella

Cautiva de los soldados

Uno subía la escala

Otro acechaba hacia abajo

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Qué importa cómo se llame

La claridad de sus pasos

Fuera uno de la capilla

Y otro de ella se escapase

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Fieles eran uno y otro

De labios corazón brazos

Ambos afirmaban que ella

Vive, y vivir para ver

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Si el granizo bate el trigo

Loco hacerse el delicado

Loco quien piensa en sus cuitas

Dentro del común combate

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Arriba en la ciudadela

El centinela tiró

Dos veces y vaciló uno

Cae el otro y morirá

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Prisioneros están, uno

En el más triste jergón

Se hiela uno más que el otro

Otro prefiere las ratas

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Un rebelde es un rebelde

Funéreos nuestros sollozos

Al llegar el alba cruel

Pasaban a mejor vida

Εl que creía en el cielo

El que no creía en él

Siempre en sus labios el nombre

De a quien jamás engañaron

Chorrea su roja sangre

De igual color de igual brillo

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Corre la sangre y se mezcla

A la tierra que él amó

Para que en la estación nueva

Uva moscatel madure

El que creía en el cielo

El que no creía en él

Corre uno y el otro alígero

De Bretaña o del Jura

Sea frambuesa o ciruela

Cantará otra vez el grillo

Decid flauta o violoncelo

El doble amor que abrasó

La alondra y la golondrina

Y la rosa y la reseda.


Traducido por Javier Sologuren

Louis Aragon : LA ROSE ET LE RÉSÉDA



à Gabriel Péri et d’Estienne d’Orves
comme à Guy Môquet et Gilbert Dru 

Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Tous deux adoraient la belle
Prisonnière des soldats
Lequel montait à l'échelle
Et lequel guettait en bas
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Qu'importe comment s'appelle
Cette clarté sur leur pas
Que l'un fut de la chapelle
Et l'autre s'y dérobât
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Tous les deux étaient fidèles
Des lèvres du coeur des bras
Et tous les deux disaient qu'elle
Vive et qui vivra verra
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Quand les blés sont sous la grêle
Fou qui fait le délicat
Fou qui songe à ses querelles
Au coeur du commun combat
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Du haut de la citadelle
La sentinelle tira
Par deux fois et l'un chancelle
L'autre tombe qui mourra
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Ils sont en prison Lequel
À le plus triste grabat
Lequel plus que l'autre gèle
Lequel préfère les rats
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Un rebelle est un rebelle
Deux sanglots font un seul glas
Et quand vient l'aube cruelle
Passent de vie à trépas
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Répétant le nom de celle
Qu'aucun des deux ne trompa
Et leur sang rouge ruisselle
Même couleur même éclat
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
Il coule il coule il se mêle
À la terre qu'il aima
Pour qu'à la saison nouvelle
Mûrisse un raisin muscat
Celui qui croyait au ciel
Celui qui n'y croyait pas
L'un court et l'autre a des ailes
De Bretagne ou du Jura
Et framboise ou mirabelle
Le grillon rechantera
Dites flûte ou violoncelle
Le double amour qui brûla
L'alouette et l'hirondelle
La rose et le réséda.

Paul Éluard: COUVRE-FEU

 



COUVRE-FEU
Que voulez-vous la porte était gardée

Que voulez-vous nous étions enfermés

Que voulez-vous la rue était barrée

Que voulez-vous la ville était matée

Que voulez-vous elle était affamée

Que voulez-vous nous étions désarmés

Que voulez-vous la nuit était tombée

Que voulez-vous nous nous sommes aimés.

Paul Éluard: TOQUE DE QUEDA




Qué querían, si la puerta estaba custodiada.

Qué querían, si nos habían encerrado.

Qué querían, si las calles están clausuradas.

Qué querían, si la ciudad está sometida.

Qué querían, si ella estaba ansiosa.

Qué querían, si nos habían desarmado.

Qué querían, si la noche había caído.

Qué querían. Sí nos hemos amado.








En 1940 los alemanes instituyeron el toque de queda de las 10 p.m. y las 5 a.m. (los horarios variaban de un pueblo a otro) con el objetivo de limitar las acciones de la Resistencia Francesa.

El poema da a conocer el pesado control que tenían que soportar los franceses tanto en los territorios ocupados como en el gobierno de Vichy, pero también nos transmite las poderosas razones por las un combatiente  de la Resistencia tuvo que hacer a un lado su deber.

Se ha dicho que Eluard escribió este poema el 22 de febrero de 1942 durante una visita al editor y crítico de arte Christian Zervos, en el Hotel du Cheval-Blanc en Vézelay.

Couvre-feu se difundió en la revista
Messages, Cahier de la Poésie française eludiendo la censura antes de ser publicado el poemario Poésie et Vérité 1942. Se le considera poesía de contrabando o semi-clandestina.



Paul Éluard: A LA MEMORIA DE PAUL VAILLANT-COUTURIER


 

Vivo en el barrio de la Chapelle
Y el diario de mi célula se llama
Los Amigos de la Calle os hablan
No lo vendemos lo distribuimos
Sólo nos cuesta un poco de nuestro tiempo

Y mi corazón está con los Amigos de la Calle
Ellos me hablan me estimulan
A ser un hombre de la calle
Multiplicado por la amistad por el deseo
De estar unidos para ser fuertes

Las gentes de mi calle tienen las mismas penas
Las mismas esperanzas de no tanta desgracia
Y los mismos amores mi corazón está con ellos
Todo mi corazón en su inocente corazón
Lo sé yo hablo por ellos

Ellos hablan por mí nuestras palabras son iguales
Nuestra calle nos lleva a otras calles a otros hombres
A otros tiempos y en el tiempo a ti
Paul Vaillant-Couturier que eras como nosotros
Jurabas por nosotros y nosotros por ti

Juramos que la vida será mejor un día. 

Versión de Marcelo Ravoni



https://www.cinearchives.org/Films-447-548-0-0.html

https://fr.wikipedia.org/wiki/Paul_Vaillant-Couturier

30 jul 2023

Vladimir Maiakovski: ¡A TODOS!



De mi muerte, no se culpe a nadie, y por favor, sin comentarios.
Al difunto le molestaban enormemente.
Mamá, hermanas, camaradas, perdónenme, -no es un método-
(no se lo aconsejo a nadie), pero no tengo otra salida.
Lilí, ámame.
Camarada Gobierno: mi familia se compone de Lilí Brick, mamá,
mis hermanas y Verónica Vitóldovna Polónskaia.
Si les haces la vida soportable, gracias.
Envíen los versos sin terminar a los Brick. Ellos sabrán descifrarlos.
Como se dice,
el “incidente” ha terminado,
“la barca del amor,
se estrelló contra la vida cotidiana”:
Estoy a mano con la vida,
y es inútil recordar,
dolores,
desgracias,
y ofensas recíprocas.
Sigan felices.
Vladímir Mayakovski
12-4-1930





Interesante nota sobre Lilí Brik clic.

Artículo de El Viejo Topo sobre el último adiós de Maiakovski clic.

10 dic 2022

Vladimir Maiakovski: EL POETA ES UN OBRERO

 Se le ladra al poeta:

«¡Quisiera verte con un torno!

¿Qué, versos?

¿Esas pamplinas?

¡Y cuando llaman al trabajo, te haces el sordo!»

Sin embargo

es posible que nadie

ponga tanto ahínco en la tarea

como nosotros.

Yo mismo soy una fabrica.

Y si bien me faltan chimeneas,

esto quiere decir

que más coraje me cuesta serlo.

Sé muy bien

que no gustáis de frases vacías.

Cuando aserráis la madera, es para hacer leños.

Pero nosotros

qué somos sino ebanistas

que trabajan el leño de la cabeza humana.

Por supuesto

que pescar es cosa respetable.

Echar las redes.

¿Quién sabe? ¡Tal vez un esturión!

Pero el trabajo del poeta es más beneficioso:

la pesca de hombres vivos, esto es lo mejor.

Enorme, ardiente es el trabajo en los altos hornos,

donde se forma el hierro chisporroteante.

¿Pero quién

se atrevería a llamarnos holgazanes?

Nosotros bruñimos las mentes con áspera lengua.

¿Quién es más aquí?

¿El poeta o el técnico

que procura a los hombres

tantas ventajas prácticas?

Los dos.

Los corazones son también motores.

El alma es también fuerza motriz.

Somos iguales.

Camaradas de la clase trabajadora.

Proletarios del cuerpo y del espíritu.

Solamente unidos

solamente juntos podremos engalanar el universo,

acelerar el ritmo de su marcha.

ante una oleada de palabras, levantemos un dique.

¡Manos a la obra!

¡Al trabajo, nuevo y vivo!

Y a los que discursean

que se les mande al molino.

¡Para que el agua de sus discursos haga girar sus aspas!